Tras la carga impositiva a los servicios digitales que a partir del próximo agosto 2022 el Gobierno pretende establecer entre los que se encuentran plataformas virtuales de alojamientos de renta corta a turistas y particulares en el país, como el modelo Airbnb; Andrés Marranzini, vicepresidente de la Asociación de Hoteles y Turismo (Asonahores), valoró dicha medida.
Consideró necesarias las regulaciones ya que en el mundo para poder ofrecer los referidos servicios se necesitan garantías que obliguen al cumplimiento de las normas de calidad del sector turístico.
Al tiempo, negó que los Airbnb compitan con el sector hotelero, sin embargo, resaltó que se enfrentan a una competencia desleal, debido al incumplimiento de normas de salud, seguridad, entre otras, que se les exige a los hoteles.
Y es que, entiende que la falta de regulación abre camino a “una oferta ventajosamente más barata por no tener que cumplir con estas exigencias que sí cumplen los hoteles y, por ende, coloca un techo al precio por habitación que se puede colocar al producto”.
“No se está planteando nada que no ocurra en el sector inmobiliario en la Republica Dominicana», puntualizó.
Marranzini aboga por que los entes reguladores evalúen los mecanismos de países que han regimentado con éxito al renglón inmobiliario denominado Airbnb, según Despierta con CDN.
Destacó los avances de la DGII en el marco normativo para organizar ese tipo de negocio que crece sin regulación y señaló que lo importante a contemplar es que no se produzcan, en la medida de lo posible, distorsiones en la oferta y que provoquen efectos no deseados en un modelo o en otro.