A pesar de ser defendido por el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, el llamado «kit covid» o «tratamiento temprano» para el coronavirus contribuye a aumentar el número de muertes de pacientes críticos, según señalaron médicos responsables de unidades de cuidados intensivos consultados por la BBC.
Más de un año después del inicio de la pandemia en la nación sudamericana, Bolsonaro sigue respaldando el uso de medicamentos como la hidroxicloroquina y la ivermectina, a pesar de que varias investigaciones señalan que estos fármacos no son efectivos en el tratamiento de la covid-19.
«Muchos se han salvado en Brasil con esta asistencia inmediata. En este mismo edificio (el palacio gubernamental de Planalto, en Brasilia), más de 200 personas contrajeron covid y casi todos, hasta donde yo sé, incluyéndome a mí, buscaron este tratamiento con una serie de productos como ivermectina, hidroxicloroquina, azitromicina», afirmó el mandatario a principios de este mes.
Sin embargo, las investigaciones científicas señalan que estos productos no tienen ningún efecto en la prevención o el tratamiento temprano del virus.
Y médicos de hospitales consultados por BBC News Brasil dicen que la defensa y el uso del llamado «kit covid» contribuyen de diferentes maneras a incrementar las muertes en el país.
Brasil tiene el segundo mayor número de infecciones confirmadas y muertes del mundo, por detrás de Estados Unidos.
En total, el país registró hasta el 16 de marzo más de 11,6 millones de contagios y alrededor de 282.000 muertes.
El reciente aumento de casos es atribuido a la propagación de variantes altamente contagiosas del virus.
Porcentajes
El doctor de cuidados intensivos Ederlon Rezende, coordinador en un hospital público de São Paulo, señala que entre el 80% y el 85% de las personas que resultaron contagiadas no desarrollarán una forma grave de covid-19.
Para estos pacientes, explica, el uso del «kit covid» no ayuda en absoluto. Tampoco puede causar daño si la persona no lo toma dosis excesivas, no desarrolla efectos secundarios o tiene enfermedades que pueden empeorar con estos medicamentos.
Pero, para el 15% o 20% que necesita hospitalización, estos medicamentos pueden complicar el tratamiento y contribuir a su muerte.
«La mayor preocupación es por el 15% que desarrolla una forma severa de la enfermedad y termina llegando a la unidad de cuidados intensivos. Es en estos pacientesen los que los efectos adversos de estos fármacos ocurren con mayor frecuencia, teniendo un impacto en su supervivencia», afirma Rezende, quien fue presidente de la Asociación Brasileña de Medicina Intensiva.
Otro factor que apuntan los expertos es que el «kit covid» puede tener efectos indirectos.
Indican que su uso genera retrasos en la búsqueda de atención clínica por parte de los contagiados, absorbe recursos públicos que se podrían destinar a fármacos de apoyo en situaciones de intubación y desvía la atención de los protocolos de tratamiento apropiados.
«Hubo algunos alcaldes que distribuyeron una bolsa con el ‘kit covid’ y personas que pensaron que tomando esoso fármacos nunca tendrían la enfermedad. Luego tardaron demasiado tiempo en buscar ayuda cuando enfermaron», explica Carlos Carvalho, director de la División de Neumología de un hospital en São Paulo.
Entre los efectos nocivos por buscar atención de forma tardía está la intubación, cuando el pulmón ya está gravemente lesionado por el esfuerzo de respirar.
Los pacientes que reciben una máscara de oxígeno o ventilación mecánica invasiva antes de llegar a la insuficiencia respiratoria aguda tienen más probabilidades de sobrevivir, explican los médicos de cuidados intensivos.
«La falta de organización centralizada y la información no coordinada sobre medicamentos ineficaces contribuyeron a la mayor letalidad en nuestra población. No diré que representa el 1% o el 99% (de las muertes), pero lo hizo», agrega Carvalho, quien también es profesor universitario.
Efectos colaterales
La neumóloga Carmen Valente Barbas afirma que la mayoría de las personas a las que atiende acudieron a productos del llamado «kit covid».
«La mayoría está tomando estos medicamentos. En cada videoconsulta que hago, la gente dice que los está tomando y tomándolos en grandes dosis», afirmó a BBC News Brasil.
La mayor preocupación de los médicos de cuidados intensivos es el efecto secundario en los pacientes que llegan a instancias graves por el virus y que ya están comprometidos por el funcionamiento de sus órganos vitales.
«Estos medicamentos no ayudan, no previenen la intubación y tienen efectos secundarios, como hepatitis, problemas renales, más infecciones bacterianas, diarreas, gastritis,…», agrega Barbas.
La hidroxicloroquina, sugerida por Bolsonaro en varias oportunidades, es un medicamento de uso común en pacientes con lupus, artritis reumatoide, enfermedades fotosensibles y malaria.
La ivermectina, también parte del «kit covid» es un desparasitante utilizado para combatir gusanos, piojos y garrapatas.
La azitromicina es un antibiótico que, según los médicos, solo debe usarse en caso de infección bacteriana y no para prevenir un virus.
Arritmias, delirios y problemas renales
Ederlon Rezende es uno de los expertos que advierte que la hidroxicloroquina puede causar arritmia cardíaca, solo uno de los posibles efectos secundarios del fármaco.
En un paciente que desarrolla un caso de covid-19 de gravedad, puede generar un efecto adverso crítico, porque la enfermedad causada por el coronavirus también afecta al corazón, al promover la inflamación del músculo cardíaco y la trombosis en los vasos y tejidos.
Rezende también señala que observó problemas en pacientes que necesitan ser sedados para la intubación y que se despiertan de la sedación con mayor confusión mental por el uso abusivo de ivermectina antes de llegar al hospital.
«El paciente, al despertar de la intubación, puede experimentar delirio. En pacientes con covid esto es muy frecuente, porque el virus atraviesa la barrera hematoencefálica y afecta al cerebro, especialmente a la región frontal, provocando inflamación», explica.
«La invermectina es un fármaco que también penetra en el cerebro cuando está inflamado, deprime aún más el cerebro y empeora la calidad del despertar del paciente intubado. Esta ha sido una complicación frecuente en los pacientes que utilizaron este medicamento antes de llegar a cuidados intensivos».
La ivermectina, dice, también puede causar daño renal, que dificulta la curación de un paciente con covid grave, ya que la enfermedad tiene el potencial de causar complicaciones renales y requerir hemodiálisis.
En las últimas semanas, Bolsonaro comenzó a mencionar a la nitazoxanida, conocida como Annita, como candidata para ser parte del kit de covid.
El problema, además de no haber ninguna evidencia científica de eficacia, es que la gente empezó a tomar este producto junto con la ivermectina, intoxicando el organismo, de acuerdo a lo visto por Cármen Valente Barbas.
«La interacción de estos medicamentos en conjunto es peligrosa. La gente está tomando Annita junto con ivermectina y eso es absurdo», asegura.
Infecciones más resistentes
Otro problema advertido es la reciente inclusión de corticosteroides en el «kit covid».
Las investigaciones muestran que los corticosteroides ayudan a reducir la mortalidad entre los pacientes críticamente enfermos que necesitan ventilación mecánica a través de máscaras o intubación.
Pero para el resto de la población su uso puede causar serios problemas.
«Para los pacientes que no son sintomáticos o asintomáticos, los corticosteroides pueden incluso disminuir la inmunidad y causar otras enfermedades. Y, muchas veces, (autoridades locales) autorizaron el uso de un corticosteroide junto con antibióticos«, afirma Carlos Carvalho.
«Si el paciente empeora y tiene una infección, tendrá una infección más grave porque está tomando un fármaco inmunosupresor y tendrá una bacteria resistente a los antibióticos que quemó, usándola de forma inapropiada», explica.
Por su parte, el médico Jaques Sztajnbok también dice que el uso «preventivo» de azitromicina y corticosteroides dentro del «kit covid» provoca más mortalidad.
«Si le dan corticosteroides a un paciente innecesariamente, su desempeño será peor», apunto a BBC News Brasil.
La «falsa seguridad»
Entre las consecuencias indirectas del «kit covid» está, según los médicos de cuidados intensivos, la «falsa seguridad» que producen esos medicamentos, retrasando la búsqueda de atención médica.
Un problema recurrente en las unidades de cuidados intentivos brasileñas, dicen, es la llegada de pacientes críticamente enfermos que, al sentirse protegidos por la hidroxicloroquina y similares, buscaron ayuda médica cuando ya era demasiado tarde.
«Este autotratamiento da una falsa seguridad y la gente tiende a retrasar más la búsqueda de cuidados cuando evoluciona a una forma seria», señala Ederlon Rezende.
Entre los riesgos de buscar ayuda demasiado tarde está dañar el pulmón hasta el punto de que el problema no se puede revertir con ventilación mecánica e intubación.
«Cuanto más tiempo transcurre entre la necesidad de cuidados intensivos y el ingreso efectivo a la cama del hospital, mayor es la mortalidad», apunta Sztajnbok.
La neumóloga Barbas, por su parte, añade que la insuficiencia respiratoria aguda puede evolucionar rápidamente hasta la muerte.
«Su condición puede empeorar muy rápidamente y la gente puede morir en casa, sin tener tiempo de llegar al hospital», afirma.
Recursos de tratamientos probados
Quizás la mayor causa de muerte causada por el enfoque del gobierno federal en la defensa de medicamentos ineficaces es el gasto de dinero y tiempo.
Esos recursos podrían usarse para comprar equipos, vacunas y producir un protocolo nacional con pautas para el cuidado de pacientes críticamente enfermos con covid.
A diferencia de lo que sucedió en los países europeos y en Estados Unidos, después de un año de pandemia, el Ministerio de Salud brasileño no elaboró un documento con información a seguir por los profesionales de salud.
«Se perdió el tiempo discutiendo el tratamiento temprano sin ninguna evidencia científica y no se invirtió en difundir información sobre cuidados efectivos para pacientes críticos y técnicas para identificar insuficiencia respiratoria», afirma el investigador Fernando Bozza, autor de una encuesta que reveló que el 80% de los pacientes intubados en Brasil en 2020 fallecieron.
Además, los recursos que podrían haberse destinado a la adquisición y reparto de medicamentos necesarios para la intubación o para la creación de camas de cuidados intensivos se gastaron en la compra de cloroquina y otros elementos del llamado «tratamiento temprano», sin evidencia científica.
Datos a los que tuvo acceso BBC News Brasil mostraron que el gasto del gobierno de Bolsonaro en cloroquina, hidroxicloroquina, Tamiflu, ivermectina, azitromicina y nitazoxanida superó los US$16 millones hasta enero de este año.
Mientras tanto, médicos y asociaciones farmacéuticas advierten que el arsenal de los medicamentos necesarios para la intubación está a punto de agotarse.
Por ello, la neumóloga Barbas afirma que se podrían haber salvado vidas si los recursos se hubieran invertido en soluciones científicamente probadas.
«Y es un gasto que también podría utilizarse para comprar vacunas», lamenta.
— publicidad —