SANTO DOMINGO.-Sobrevolar la zona de Bávaro, Punta Cana y Uvero Alto brinda la oportunidad de ver las largas hileras de playas blancas custodiadas de enormes instalaciones hoteleras con piscinas multiformes rodeadas de bares y habitaciones.
Luego de pasada esa primera impresión, viene el segundo pensamiento: están desoladas, sin turistas, vacías. Antes de marzo pasado, ese mismo panorama hubiera estado acompañado de millares de personas que desde lo alto se verían como hormigas.
Hoy solo se ven las instalaciones vacías.
Ese viernes el ministro de Turismo, David Collado, llegaba al hotel Dream, una cadena que tiene cuatro grandes hoteles en los principales puntos turísticos del país para un acto de reapertura de sus instalaciones en Uvero Alto.
La primera apuesta de los hoteles Dreams fue el de La Romana, cuya reapertura decidieron anunciarla con solo una reservación. En Uvero Alto hicieron lo propio, aunque con once reservaciones en un hotel con más de 600 habitaciones.
David Collado fue recibido por Daniel Hernández, en representación del equipo gerencial de la cadena, y por Andrés Marranzini, vicepresidente de la Asociación Nacional de Hoteles y Restaurantes (Asonahores).
Hernández explicó que las medidas adoptadas por las autoridades para la reapertura del turismo en medio de la pandemia por el Covid-19 ha traído confianza a los inversionistas y ha llamado la atención de los tuors operadores.
La reapertura está sustentada, fundamentalmente, al turismo local, pero eso permite que los turistas extranjeros empiecen a contemplar venir al país cuando la situación se lo permita.
El personal de esos hoteles ha durado varios meses estudiando los protocolos contra el Covid-19 para garantizar la seguridad de los visitantes y de todos los empleados.
Hasta el momento ya había disponible 11 mil habitaciones, en los próximos días se espera lleguen a 25 mil y a final de año a 40 mil habitaciones reabiertas.
David Collado
El ministro de Turismo, David Collado, destacó el respaldo de los propietarios de las grandes cadenas hoteleras de acoger el llamado del Gobierno de reabrir los hoteles para reactivar el turismo.
En un breve discurso recordó a los presentes que la crisis del turismo tiene rostros humanos, pues de esa actividad dependen cientos de miles de familias que trabajan en los hoteles, restaurantes, la agricultura que suple de alimentos y la gran diversidad de negocios complementarios.
Anunció que desde el Gobierno se gestiona que los gobiernos que tienen trabas para el ingreso de pasajeros provenientes de República Dominicana pasen a flexibilizarlas.
El Gobierno ha dispuesto, en esos casos, la realización de pruebas aleatorias de Covid-19. Informó que el presidente Luis Abinader dispuso supervisar los hoteles para garantizar que cumplan los protocolos.
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